martes, 13 de abril de 2010

me río
tanta mezquinidad conmigo misma no hacía falta
ahora me regalo la sonrisa
ahora me descubro insospechable
la loca de la casa viene por su propio pie a mi lado
la sonrío, la quiero, la transformo en mi chalana de mercado

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Algo que aprecio y cada vez me sorprende en tus escritos es, más allá del desparpajo, el toque de delirio, esa "loca de la casa", una pincelada irracional que tiembla en ellos.
Saludos

Marina Ruiz Rodríguez dijo...

Sip, así le decía snta teresa a la razón "la loca de la casa", Muchas gracias por visitarme.

Anónimo dijo...

Y es que nunca se sabe quién es el loco!
Nada qué agradecer, si el placer es mîo de saber que vuelves a colgar escritos, soy yo, en tanto que lector, quien los disfruto.